Como has ido viendo hasta ahora con los mitos y leyendas, existen una serie de características comunes a ambos tipos de narrativa, es decir, estos géneros comparten unos elementos fundamentales que hacen posible el acto de narrar.
Los imprescindibles para que un texto sea considerado un texto narrativo son:
- LA VOZ
- LOS PERSONAJES. LAS TIPOLOGÍAS DE LOS PERSONAJES
- LA ESTRUCTURA O TRAMA
- EL TIEMPO
- EL ESPACIO
- EL DISCURSO VERBAL
Estos epígrafes van a ser ampliados, pero me gustaría dejar claro desde principio, que aunque estos elementos caractericen el texto narrativo, existen novelas en las que ninguno, o muy pocos, de estos elementos están presentes, lo cual no significa que no se trate de una novela, sino de la transgresión de la novela misma, en otras palabras, una de las características de la novela es no ser una novela. O como dijo un experto en Narratología, Darío Villanueva, la novela es "un género cuya única característica es haberlas tenido todas y haber experimentado todas las transgresiones".
LA VOZ
La voz es la del narrador que cuenta la historia. Es el primer elemento para que un texto sea narrativo, ¿quién cuenta la historia? ¿Desde qué perspectiva lo hace? ¿Vive como un personaje más los acontecimientos de la historia? ¿O los ve desde fuera, tranquilamente, juzgando a sus personajes y condenándolos a un destino que igual ni él mismo conoce?
Tradicionalmente se ha asociado la voz del narrador con las personas verbales, de manera que si el relato está contado por una primera persona, pensamos que se trata de un texto AUTOBIOGRÁFICO, o PROTAGONISTA. En cambio, si el relato está contado en tercera persona, dependiendo del grado de implicación del narrador, estaríamos delante de conceptos como el narrador OMNISCIENTE, o CINEMATOGRÁFICO.
Sin embargo, existen narradores en segunda persona que atraen la atención del lector desde el primer momento, puesto que la acción se sitúa delante de sus ojos, implicándolo hasta tal punto que la identificación con el personaje principal es absoluta. El efecto en el lector es como el de estar frente a un espejo.
Observémoslo en el siguiente ejemplo, extraído de la obra AURA, de Carlos Fuentes:
"LEES ESE ANUNCIO: UNA OFERTA DE ESA
NATURALEZA no se hace todos los días. Lees y relees el aviso. Parece dirigido a
ti, a nadie más. Distraído, dejas que la ceniza del cigarro caiga dentro de la
taza que has estado bebiendo en este cafetín sucio y barato. Tú releerás. Se
solicita historiador joven…"
Narradores
|
Acontecimientos
analizados desde el interior
|
Acontecimientos
observados desde el exterior
|
Narrador presente
como personaje en la acción
(homodiegético)
|
1. El héroe cuenta su
historia
(autodiegético)
|
2. Un testigo cuenta
la historia del héroe
(alodiegético)
|
Narrador ausente
como personaje de la acción
(heterodiegético)
|
4. El autor analista u
omnisciente cuenta la historia
|
3. El autor cuenta la
historia desde el exterior
|
Como ejemplos de estos tipos de narradores citemos las siguientes obras:
Del narrador número 1, recordamos cualquier narrador autobiográfico, como el propio Guzmán de Alfarache en la Vida de Guzmán de Alfarache, de Mateo Alemán.
El número 2 se corresponde con un narrador testigo de los hechos del protagonista, podría ser Watson, en la serie de Las aventuras de Sherlock Holmes; o Ángela Carballino, que cuenta la historia del párroco en San Manuel Bueno Mártir.
En el caso 3, el narrador oculto se limita a poner en palabras acciones y conductas, como los relatos de Hemingway, El viejo y el mar.
Por último, en el número 4 vemos al narrador omnisciente por excelencia en La Regenta, de Clarín.
Recordemos que se trata solo de una clasificación general, existen muchas excepciones en novelas donde se mezclan las distintas voces del narrador, o deslizamientos de la voz, del narrador a un personaje, o de un personaje a la voz que cuenta la historia de una anécdota, o cuento, como ocurre en El Conde Lucanor.
Además de esta clasificación, existe otra muy interesante sobre la FOCALIZACIÓN. Esta teoría se basa en el grado de información que tiene el narrador respecto a la historia que cuenta, de ahí que se realice una gradación desde cero.
Apliquemos la teoría a los siguientes ejemplos.
ACTIVIDADES:
1) Lee atentamente los siguientes textos he indica de qué tipo de narrador se trata. Justifica tus respuestas y utiliza la terminología apropiada.
TEXTO 1
Cumplió los siete años. Y un día en la escuela, don Fermín le preguntó desde su montura: "¡A ver, Albacete!, ¿qué cosa grande es Dios?" Manuel no lo sabía pero vio a un compañero que, por entre las patas del caballo, empezó a hacerle señas. Fingía que fumaba un puro, exagerando el gesto como si fuese un banquero o un apoderado taurino. Entonces cayó en la cuenta. "Dios es el Espíritu Puro", proclamó... (Luis Landero, Entre líneas).
TEXTO 2
Para alguien como yo es una sensación muy extraña escribir un diario. No solo porque nunca he escrito, sino porque me da la impresión de que más tarde ni a mí ni a ninguna otra persona le interesarán las confidencias de una colegiala de trece años. (Ana Frank, Diario).
TEXTO 3
Describiré brevemente y por su orden estos ríos, empezando por Jarama: sus primeras fuentes se encuentran en el gneis de la vertiente Sur de Somosierra, entre el Cerro de la Cebollera y el de Excomunión. Corre tocando la Provincia de Madrid, por La Hiruela y por los molinos de Montejo de la Sierra y de Pradeña del Rincón. Entra luego en Guadalajara, atravesando pizarras silurianas, hasta el Convento que fue de Bonaval. Penetra por grandes estrechuras en la faja caliza del cretáceo — prolongación de la del Pontón de la Oliva, que se dirige por Tamajón a Congostrina hacia Sigüenza... Para leer más: Sánchez Ferlosio, El Jarama
LOS PERSONAJES. LAS TIPOLOGÍAS DE LOS PERSONAJES
El personaje de ficción, a diferencia del personaje humano puede seguir viviendo después de morir, necesita poca comida, no requiere el tiempo del sueño, puede aparecer en la historia sin infancia, entregado como un paquete en mitad del relato, pero podemos llegar a conocerlo mejor que a cualquiera que nos rodea.
Sin embargo, casi todos los personajes de novela pueden clasificarse dentro de un esquema de funciones propuesto por el especialista en Narratología, Vladímir Propp.
Para leer más: Las estructuras de los relatos según el tipo de personaje.
En toda historia siempre hay un personaje que desea un "objeto", que para ser alcanzado necesita pasar por unas pruebas, o se enfrentarse a otros personajes. Puede actuar solo o ayudado por otros. ¿Os suena este argumento? Seguro que podéis citar multitud de películas o libros en los que el protagonista se ajusta a este perfil.
Los personajes pueden ser planos o redondos.
Los personajes planos o esquematizados son aquellos que se construyen en torno a una sola idea o cualidad, es la vecina cotilla, el amigo cobarde y gordo, el negro que siempre muere antes que el protagonista en la escena de acción.
Sin embargo, un personaje plano no tiene por qué tener menos relevancia para la acción que un personaje redondo, pues tienen como ventaja el ser reconocidos fácilmente por el lector y sirven para agilizar la acción en la novela, puesto que al ser prototípicos no necesitan de una descripción ni introducción precisa.
En cambio, los personajes redondos o moldeados, en apariencia, serían idóneos para prolongar sus vidas, que podrían ser distintas incluso a las que ya han sido narradas. La naturaleza de un personaje redondo es evolucionar, en su capacidad para sorprender de una manera convincente.
En cualquier historia podemos encontrar personajes que correspondan a estos prototipos:
El especialista en Narratología V. Propp estudió los diferentes papeles que suelen desempeñar los personajes en los cuentos tradicionales y estableció estos siete roles:
LA ESTRUCTURA O TRAMA
En líneas generales, una narración refiere una serie de sucesos ligados entre sí. Implica la dimensión del tiempo, pero no la conexión entre los sucesos, lo que da juego a que existan novelas que se presenten de manera fragmentaria, como Rayuela, de Julio Cortázar.
Por norma, la historia empieza presentando una situación inicial, con la presentación del héroe y su propósito (Planteamiento). Luego le siguen los hechos que van desarrollando la acción (Nudo) hasta que desencadenan los hechos en un final feliz, abierto, cerrado, circular (Desenlace).
Esta estructura se corresponde con una visión interna de la narración, ya que la externa se fija en el número de capítulos o partes del libro.
El hecho de que se alteren algunas de las partes clásicas ("ab ovo") de la estructura pone de manifiesto el interés del creador de la obra por llamar la atención hacia diferentes aspectos. Por ejemplo, si el final de la obra es dado, como en Crónica de una muerte anunciada, de Gabriel García Márquez, la trama del libro no se centra tanto en el hecho de que se ha producido un asesinato, sino en las circunstancias que han hecho posible que se produzca ese asesinato. La narración se produce "in extrema res".
En cambio, si la acción se presenta en la obra en mitad de un conflicto, recibe el nombre de "in media res".
EL TIEMPO
Relacionado con la estructura de los textos narrativos, está la configuración del tiempo. Si la estructura sigue el orden clásico, lo normal es que el orden de los acontecimientos en el tiempo sea cronológico, o lineal.
En el momento en que decidimos alternar el orden en la estructura, el tiempo también se transforma, puede haber elipsis u omisiones, lentitud en la narración, digresión, saltos hacia delante en la historia (FLASH FORWARD) o prolepsis; o saltos hacia el pasado (FLASH BACK) o analepsis.
También ha de quedar clara la diferencia entre el tiempo de la historia, aquel en el que se supone suceden los acontecimientos relatados, y un tiempo del discurso, aquel en el que la voz narradora nos refiere los sucesos y el acto de leer.
Puedes ampliar estos conceptos en el siguiente enlace. No es necesario que realices las actividades propuestas en ese enlace.
EL ESPACIO
Si el tratamiento del tiempo en la novela condiciona su estructura, la manipulación del espacio sitúa la novela en su género correspondiente. Es decir, si nuestra novela se sitúa en otro planeta, directamente podemos clasificar la obra dentro del género de ciencia ficción. De ahí la importancia por parte del autor de la obra se saber en qué lugar se desarrollará la historia.
La elección de un espacio físico es importante, pero, a veces, en una novela, el espacio es psicológico, y la acción se desarrolla dentro de la cabeza del personaje principal, como ocurre en las novelas que son un único monólogo interior, como en Cinco horas con Mario, de Miguel Delibes.
EL DISCURSO VERBAL
El discurso verbal hace referencia al tiempo verbal elegido para la narración. Tradicionalmente, las narraciones recurren al uso de los verbos en pretérito, puesto que se narran hechos pasados. Pero no nos resulta extraño que haya obras narrativas donde el uso del verbo sea en tiempo presente, de manera que los hechos se presentan ante el lector delante de sus ojos, como si estuviera asistiendo a ellos. Puede que ese sea el éxito de las obras de Stephanie Meyer, Crepúsculo, por ejemplo.
Rara vez se presentan los hechos utilizando los verbos en futuro y condicional, pero existen algunas obras, como puedes ver en este enlace.
MONÓLOGO, DIÁLOGO, ESTILO DIRECTO E INDIRECTO
Estas son las formas en las que los personajes expresan su mundo interior dentro del texto narrativo. Veamos la teoría y algunos ejemplos: Pulsa aquí
Sin embargo, casi todos los personajes de novela pueden clasificarse dentro de un esquema de funciones propuesto por el especialista en Narratología, Vladímir Propp.
Para leer más: Las estructuras de los relatos según el tipo de personaje.
En toda historia siempre hay un personaje que desea un "objeto", que para ser alcanzado necesita pasar por unas pruebas, o se enfrentarse a otros personajes. Puede actuar solo o ayudado por otros. ¿Os suena este argumento? Seguro que podéis citar multitud de películas o libros en los que el protagonista se ajusta a este perfil.
Los personajes pueden ser planos o redondos.
Los personajes planos o esquematizados son aquellos que se construyen en torno a una sola idea o cualidad, es la vecina cotilla, el amigo cobarde y gordo, el negro que siempre muere antes que el protagonista en la escena de acción.
Sin embargo, un personaje plano no tiene por qué tener menos relevancia para la acción que un personaje redondo, pues tienen como ventaja el ser reconocidos fácilmente por el lector y sirven para agilizar la acción en la novela, puesto que al ser prototípicos no necesitan de una descripción ni introducción precisa.
En cambio, los personajes redondos o moldeados, en apariencia, serían idóneos para prolongar sus vidas, que podrían ser distintas incluso a las que ya han sido narradas. La naturaleza de un personaje redondo es evolucionar, en su capacidad para sorprender de una manera convincente.
En cualquier historia podemos encontrar personajes que correspondan a estos prototipos:
El especialista en Narratología V. Propp estudió los diferentes papeles que suelen desempeñar los personajes en los cuentos tradicionales y estableció estos siete roles:
- el héroe o buscador, que es el protagonista, o la protagonista
- el rey, el que detenta la autoridad
- la princesa, de quien está enamorado el héroe y supone su recompensa
- el falso héroe que se aprovecha de todos para obtener sus beneficios
- el agresor, malvado o antagonista, es decir, "el malo malísimo"
- el donante o amigo del héroe que le ayuda en su aventura
- el auxiliar mágico, es decir, el objeto, o habilidad que tiene el héroe que le sirve para conseguir su propósito
LA ESTRUCTURA O TRAMA
En líneas generales, una narración refiere una serie de sucesos ligados entre sí. Implica la dimensión del tiempo, pero no la conexión entre los sucesos, lo que da juego a que existan novelas que se presenten de manera fragmentaria, como Rayuela, de Julio Cortázar.
Por norma, la historia empieza presentando una situación inicial, con la presentación del héroe y su propósito (Planteamiento). Luego le siguen los hechos que van desarrollando la acción (Nudo) hasta que desencadenan los hechos en un final feliz, abierto, cerrado, circular (Desenlace).
Esta estructura se corresponde con una visión interna de la narración, ya que la externa se fija en el número de capítulos o partes del libro.
El hecho de que se alteren algunas de las partes clásicas ("ab ovo") de la estructura pone de manifiesto el interés del creador de la obra por llamar la atención hacia diferentes aspectos. Por ejemplo, si el final de la obra es dado, como en Crónica de una muerte anunciada, de Gabriel García Márquez, la trama del libro no se centra tanto en el hecho de que se ha producido un asesinato, sino en las circunstancias que han hecho posible que se produzca ese asesinato. La narración se produce "in extrema res".
En cambio, si la acción se presenta en la obra en mitad de un conflicto, recibe el nombre de "in media res".
EL TIEMPO
Relacionado con la estructura de los textos narrativos, está la configuración del tiempo. Si la estructura sigue el orden clásico, lo normal es que el orden de los acontecimientos en el tiempo sea cronológico, o lineal.
En el momento en que decidimos alternar el orden en la estructura, el tiempo también se transforma, puede haber elipsis u omisiones, lentitud en la narración, digresión, saltos hacia delante en la historia (FLASH FORWARD) o prolepsis; o saltos hacia el pasado (FLASH BACK) o analepsis.
También ha de quedar clara la diferencia entre el tiempo de la historia, aquel en el que se supone suceden los acontecimientos relatados, y un tiempo del discurso, aquel en el que la voz narradora nos refiere los sucesos y el acto de leer.
Puedes ampliar estos conceptos en el siguiente enlace. No es necesario que realices las actividades propuestas en ese enlace.
EL ESPACIO
Si el tratamiento del tiempo en la novela condiciona su estructura, la manipulación del espacio sitúa la novela en su género correspondiente. Es decir, si nuestra novela se sitúa en otro planeta, directamente podemos clasificar la obra dentro del género de ciencia ficción. De ahí la importancia por parte del autor de la obra se saber en qué lugar se desarrollará la historia.
La elección de un espacio físico es importante, pero, a veces, en una novela, el espacio es psicológico, y la acción se desarrolla dentro de la cabeza del personaje principal, como ocurre en las novelas que son un único monólogo interior, como en Cinco horas con Mario, de Miguel Delibes.
EL DISCURSO VERBAL
El discurso verbal hace referencia al tiempo verbal elegido para la narración. Tradicionalmente, las narraciones recurren al uso de los verbos en pretérito, puesto que se narran hechos pasados. Pero no nos resulta extraño que haya obras narrativas donde el uso del verbo sea en tiempo presente, de manera que los hechos se presentan ante el lector delante de sus ojos, como si estuviera asistiendo a ellos. Puede que ese sea el éxito de las obras de Stephanie Meyer, Crepúsculo, por ejemplo.
Rara vez se presentan los hechos utilizando los verbos en futuro y condicional, pero existen algunas obras, como puedes ver en este enlace.
MONÓLOGO, DIÁLOGO, ESTILO DIRECTO E INDIRECTO
Estas son las formas en las que los personajes expresan su mundo interior dentro del texto narrativo. Veamos la teoría y algunos ejemplos: Pulsa aquí
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